Alfonso Meza y Carmona.
En todo esto del Covid-19 es como el cuento malo que nos platican a diferencia de que la pandemia es algo real, algo que nos acecha constantemente y hablar de ello para muchos es alarmar pero no se trata de esto, únicamente se pretende llevar la información de cuidarse, no confiarse, después nada es igual, cierto con las vacunas aplicadas, el riesgo de morir baja considerablemente pero las molestias siguen.
Lo real es que el Covid-19 nos dio con todo, una economía maltrecha, la vida normal con muchas limitaciones, en si todo se trastocó, se cambió, desde luego que nuestra vida tal y como la conocíamos ya no será igual.
Temporadas van y vienen y la pesadilla continua, no tiene final, algo muy triste y lamentable, desafortunadamente les tocó vivir una pesadilla al sector de los jóvenes que están acostumbrados a un ritmo de vida diferente a los que estamos de mediodía para la tarde, la experiencia nos dicta muchas cosas que los jóvenes escuchan pero que en su mayoría no acatan, algo comprensible.
Ahora nos hablan de una nueva variante de coronavirus más peligrosa, la ÓMICRON proveniente de Sudáfrica, la verdad no sabemos que irá a suceder, esperemos salir bien librados, lo cierto es que vemos una sociedad cansada, hastiada, llena de temores que en apariencia no escucha pero que está muy pendiente de lo que puede venir.
Así las cosas en estos tiempos difíciles.
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