El regreso a clases ha sido controversial, desde luego existe la opción por parte de padres de familia de no enviar a  sus hijos a la  escuela, eso queda  claro lo que no se entiende es que  no se ha  dicho oportunamente o no se puntualizado bien que   pasará con los alumnos que se queden en casa, es decir el aspecto logístico de este tema, si habrá  maestros atendiendo en línea, en fin ese tipo de cuestiones.

Estamos casi seguros  que la famosa frase que dijo el Presidente de la República referente a las clases presenciales de “que llueva, truene o relampaguee” una frase comúnmente usada para indicar que algo se hará a pesar de muchos opositores y decíamos que muchos miembros de su gabinete no están de acuerdo con la consabida frase, eso suponemos, no es nuestra verdad absoluta, pero frase muy significativa.

En todo este tema se debe escuchar la opinión de los maestros, de la base piramidal, d e los mismos estudiantes, no sólo la  de los especialistas que han sugerido un deterioro en el estado emocional   de millones de niños y jóvenes por el encierro y falta de interactividad con sus compañeros, desde luego no desconocemos que esto es dañino para su salud.

 El reverso de la medalla son los millones de padres de familia que tienen la percepción de que no es tiempo de enviar a sus hijos  a la escuela  ya que estamos inmersos en la pandemia del Covid-19, con alto número de contagios, que prefieren  esperar un poco más el regreso a las aulas.

Volviendo al tema de la   famosa frase, acotaremos que hay muchas situaciones que bien se pueden matizar, el pueblo mexicano por naturaleza acata disposiciones,  pero es analítico en muchas cosas, máxime si se trata de la salud de sus hijos como hoy sucede.

Se debe buscar una salida a  un tema muy difícil.

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