Caramba, escenas inéditas fue las que que vimos ayer del Capitolio en Whasington y que   nunca pensamos verlas,  ello era parte del escenario de otros pueblos, pero en los Estados Unidos, no, una nación en la que suponíamos que democracia y orden era parte de su esencia, al menos eso nos habían vendido.

Pero ver las imágenes de ayer nos parecieron surrealistas, una parte  pueblo enardecido, invadiendo un espacio que considerábamos infranqueable y nos movieron a la reflexión para concluir que todo es posible, hoy le tocó al pueblo de los Estados Unidos, que se supone es de los más vigilados y controlados pero  algo falló que permitieron que el pueblo protestara por un hecho que nunca imaginamos podría pasar en el país del norte, pero pasó.

Las escenas parecen  haber ser sacadas de un film de ciencia ficción pero son una realidad que nos permite pensar que todo puede suceder, vaya hasta muertos hubo, algo reservado a países tercermundistas, dicho con todo respeto.

El sistema gringo ha sido tocado, donde grandes sectores de la población señalan como culpable a un Presidente, Trump, al que le ganó la ambición política y desnuda algo que el mundo nunca había visto derivado de las elecciones presidenciales

Queda el hecho  ahí para la posteridad lo cual viene a demostrar una vez más que la perfección no existe.

¡Dios nos agarre confesados!

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