Ya pasó la Navidad una fiesta antiquísima  que debido a la emergencia sanitaria que vivimos, fue totalmente diferente, no existieron las tradicionales fiestas familiares, ni reuniones  sociales donde la familia festejaba hoy se debieron hacer convivencias  familiares muy reducidas ya que así lo exigían los tiempos, la nueva normalidad que  llegó  a nuestras existencia.

La gente trata de llevar a  cabo sus respectivas actividades, obvio que no es lo mismo, las condiciones actuales así lo piden mientras vemos como nuestra economía cada día se derrumba más, familias que apenas tienen lo indispensable para subsistir, millones de personas en el país, están pasando por una terrible crisis como nunca la habían vivido y mire usted, es en esta época de fiestas, de buenos deseos cuando se abordan temas como este pero hoy es muy diferente, la situación que impera llama a la reflexión y  la empatía.

Cierto, vivimos momentos difíciles, complicados pero estamos ciertos que habrá al final una luz en el túnel, que saldremos adelante, estos terribles males que estamos padeciendo no son para siempre, son pruebas muy dolorosas, así lo debemos de entender y esperar que la ciencia haga los propio para poder recuperar nuestra vida.

No perdamos la fe ni la esperanza, mañana será un día donde brille el sol en todo lo alto.

 494 total views